Lecturas de Verano: La reserva la habíamos hecho en setiembre: una cabañita en la Barra brasilera, en el complejo “Barra Atlántica” (lo recomiendo), desde el 2 de enero hasta el 15 del mismo mes. Desayunamos y sobre las 09.30, partimos rumbo a Rocha.
Cuando me senté al volante la aguja del combustible marcaba un cuarto tanque. No me preocupé ya que con esa carga me daba para hacer unos 200 kms.
UNA RATA QUE SE HIZO PASAR POR ARDILLA
Mi esposa se sentó a mi lado ya que era la encargada del mate. Carlitos y Lucía, mis dos hijos de 8 y 10 años atrás con “Melchor” una rata blanca macho, que me la vendieron por ardilla en Tristán Narvaja y que resultó ser una rata común y corriente de esas que se ven en la basura: pero blanca.
Los niños no conocían Punta del Este, por lo que decidimos con la patrona pasar a que conocieran y de paso cargaría nafta.
A las 11 ya estábamos deleitándonos con la vista a la entrada a la punta, en la zona conocida como “Punta del Chileno”.
Casi llegando al CONRAD (no me acuerdo la parada) decidí surtir combustible en la estación DISA de la mansa.
CINCO CUADRAS DE COLA
Cuando llegué al lugar, la cola de vehículos era de unas cinco cuadras. Pensé que se trataba de mucha gente que estaba volviendo a Montevideo y que habían dejado para cargar aprovechando la baja del sábado a la noche.
Con ese panorama subimos hasta Roosevelt a la otra DISA (nos gusta mucho ese sello), donde una señorita de ojos bien azules, nos informó que no había combustible. Resolví volver a la mansa, donde la cola ya era más corta. Eché 1.500 pesos de Super. Seguimos viaje rumbo a Rocha.
Pasando por la estación ANCAP de la Coronilla, pudimos ver nuevamente una cola de al menos 100 vehículos esperando para surtir combustible.
POSPONER EL AUMENTO
Rato después, recibí en el cel una whats app con una nota periodística que daba cuenta que muchas estaciones estaban sin combustible, explicando que el paro en FANCAP, sumada la especulación de muchos estacioneros, esperando comprar combustible al nuevo precio, hizo que el stock en varios establecimientos quebrara, justamente el mismo día en que empieza la temporada en Uruguay.
Asimismo, se explicaba que la gremial que nuclea a los estacioneros (UNVENU) había pedido al gobierno posponer la baja para hoy 2 a la noche a fin de que las estaciones pudieran reponer el stock de combustible y así evitar este “colapso”.
Los estacioneros se basaban en que sus socios necesitaban un día para llenar su tanque, pensando en el mismísimo comienzo de las vacaciones.
UN AIRECITO POR FAVOR
No soy periodista, ni nada parecido, pero me alcanzó lo que viví, lo que ví y lo que leí, para darme cuenta que el gobierno no accedió al pedido de los empresarios, lo que ocasionó el estrés colectivo de miles de vacacionistas como nosotros en busca de combustible.
De noche ya en la cabaña de Barra Atlántica, pensé “ché que le hubiese costado al gobierno darles un airecito a los estacioneros pensando en sus bolsillos y evitar el estrés que vivieron miles de uruguayos”.
¡¡Como Uruguay no hay!!