No hay Mundial de fútbol sin destaque de una selección que llegue a una instancia reservada para los más poderosos.
Sucedió, sucede y va a seguir sucediendo, porque los antecedentes en Mundiales indican que siempre, siempre, hay sorpresas.
Camerún, 1990.
El equipo africano dio el batacazo en el partido inaugural ganando 1-0 al último campeón del mundo, Argentina, pese a terminar con 9 jugadores.
En el partido inaugural, el legendario Roger Milla, a los 38 años, hizo su primera aparición ingresando a los 81'.
En el segundo encuentro, frente a Rumania, Milla ingresó en el complemento y marcó dos goles para darle la victoria a su equipo 2-1.
En octavos, Milla volvió a ser figura y le anotó dos goles a Colombia en tiempo de alargue para el triunfo agónico por 2-1.
En cuartos, Camerún jugó de manera heroica; porque ganaba 2-1 hasta que Inglaterra fue beneficiado con un penal y empató a 8 minutos del final. En alargue, Gary Lineker volvió a marcar de penal y le dio el triunfo a los ingleses por 3-2; los africanos merecieron mejor suerte.
Si bien Camerún no llegó a semifinal, tuvo momentos y factores épicos en ese Mundial como por ejemplo, ganarle al último campeón del mundo, primer africano en avanzar a cuartos, mostró un fútbol muy dinámico, la aparición de Roger Milla y el partido memorable con Inglaterra.
Bulgaria, 1994.
Ni antes ni después de este Mundial, Bulgaria ganó un sólo partido en Mundiales.
Comenzó el Mundial perdiendo por 3-0 ante Nigeria en el debut pero se recuperó a tiempo y venció 4-0 a Grecia (su primer triunfo mundialista) y 2-0 a Argentina, ya sin Maradona.
En octavos, superó a México por penales y en cuartos doblegó nada menos que a Alemania por 2-1, en el triunfo más hazañoso de toda su historia.
En semifinales cayó ante Italia y finalizó cuarto tras caer goleado frente a Suecia.
Los búlgaros catalogaron a este equipo como "La Generación Dorada", de la mano de su estrella, Hristo Stoichkov, quien ganó el "Botín de oro" tras consagrarse máximo goleador del Mundial.
Suecia, 1994.
Si bien Suecia ya tenía un cuarto puesto en 1938 y un subcampeonato en 1958 (como local), su participación en 1994 fue extraordinaria; tanto así, que sólo perdió un partido en todo el Mundial: fue en semifinales ante el campeón, Brasil.
Suecia terminó segundo en su grupo producto de un empate con Camerún, un triunfo ante Rusia y otro empate ante Brasil.
En octavos, superó a una sorprendente Arabia Saudita; en cuartos eliminó a la Rumania de George Hagi por penales y en semifinal cayó 1-0 con Brasil.
Suecia se desahogó en el partido por el tercer puesto tras golear 4-0 a Bulgaria.
El arquero Thomas Ravelli y los delanteros Thomas Brolin y Martin Dahlin fueron los estandartes de aquel equipo revelación.
Croacia, 1998. Davor Šuker la estrella del Real Madrid como emblema.
(foto de nota)
Los croatas habían jugado para Yugoslavia hasta 1990, cuando en 1992 se independizaron y formaron su propia selección nacional.
Su primer Mundial fue justamente en 1998, y se clasificaron tras un sufrido repechaje. Las expectativas no eran mayores; sin embargo...
En fase de grupos, venció a Jamaica y Japón, y perdió contra Argentina para avanzar segundo. En octavos, eliminó a Rumania y en cuartos goleó 3-0 a Alemania en su partido más hazañoso en la historia de los Mundiales. En semifinales cayó 2-1 ante el campeón, Francia.
Croacia se quedó con el partido por el tercer puesto tras vencer 2-1 a Holanda. Davor Suker fue el estandarte de aquel equipo y goleador del torneo.
Corea del Sur, 2002.
Corea había jugado cinco Mundiales y nunca había ganado un solo partido. Sin embargo, el equipo dirigido por Guus Hiddink aprovechó las ventajas de la localía y obtuvo un histórico cuarto puesto en la primera Copa jugada en Asia.
En octavos, llegó la primera gran polémica, cuando derrotó 2-1 a Italia en un partido que fue beneficiado por los árbitros y en cuartos eliminó a España por penales donde también fue muy discutido por las decisiones arbitrales. En semifinal cayó apenas 1-0 ante Alemania.
Finalizó cuarto tras caer 2-3 ante Turquía. Si bien fue un Mundial colmado de polémicas con arbitrajes que lo favorecieron, nadie le quita su histórico cuarto puesto logrado siendo el primer país asiático en llegar a semifinales.
Turquía, 2002.
Los resultados épicos de aquella Turquía llegaron a partir de octavos; porque, en fase de grupos, perdió en el debut con Brasil, empató con Costa Rica y le ganó a China; apenas avanzó como segundo con mejor diferencia de goles que Costa Rica.
En octavos superó a Japón y en cuartos a Senegal, que hasta esa instancia, era la gran revelación. En semifinales perdió otra vez con Brasil y quedó tercero tras vencer a Corea. Fue apenas su segunda participación en un Mundial y quedó tercero. No volvió a los Mundiales.
Uruguay, 2010.
El cuarto puesto que logró la selección de Tabárez en 2010 quedará en el mejor recuerdo de los hinchas celestes porque después de muchísimos años Uruguay retomó los primeros lugares a nivel mundial, con un Diego Forlán (ganador del Balón de Oro) determinante.
Tras un pálido empate 0-0 ante Francia en el debut, Uruguay comenzó su periplo con una goleada 3-0 ante el local, Sudáfrica, y un triunfo 1-0 ante México. En octavos venció 2-1 a Corea y en cuartos eliminó a Ghana por penales en un partido que tuvo todas las emociones posibles.
En semifinales, cayó 3-1 ante Holanda en un partido recordado tras un polémico arbitraje que le jugó en contra a Uruguay. Los de Tabárez finalizaron cuartos tras caer 2-3 ante Alemania en uno de los mejores partidos de la celeste.
Costa Rica, 2014.
Tres campeones mundiales eran sorteados en el mismo grupo y casi nadie pensó en el cuarto integrante: Costa Rica, como una especie de invitado silencioso al duelo de gigantes. Sin embargo, cuando la pelota comenzó a rodar, todo cambió...
Un sorprendente triunfo ante Uruguay, una épica victoria ante Italia y un empate con Inglaterra lo depositaron en el primer clasificado en el grupo de la muerte. La eliminación a Grecia por penales en octavos ya no era casualidad y en cuartos Holanda la eliminó por penales.
Croacia, 2018
Fue una de las más resonantes de la historia de los Mundiales porque se trató de una selección “menor” que llegó nada menos que a la final. Ganó sus tres partidos en fase de grupos, entre ellos nada menos que a la selección argentina.
En octavos se las ingenió para superar a Dinamarca en los penales y utilizó el mismo método en cuartos para dejar por el camino a Rusia. En semifinales, le llegó el turno a Inglaterra y en la final cayó con Francia.
Marruecos, 2022
Es la selección del momento. Cuando aún no finalizó el Mundial, Marruecos se transformó en la primera selección africana en alcanzar las semifinales de torneo bajo un método de juego que se ha identificado con el público.
Fue primero en su grupo tras un empate ante Croacia y los triunfos ante Bélgica y Canadá le brindaron la confianza necesaria para superar a España en octavos y luego Portugal en cuartos. Hoy, todos hablan de Marruecos, que se las tendrá que ver con el último campeón, Francia.